Energía. Publicado el 16 noviembre, 2023

SANTO DOMINGO. – La Empresa Distribuidora de Electricidad del Este (Edeeste) continúa a buen ritmo con el desarrollo del programa “Iluminado el País”, mediante el cual ya ha colocado 1,124 nuevos faroles LED y normalizado otros 33 en su zona de concesión, en beneficio de la prevención de hechos delictivos y la seguridad de las personas.

La medida, inscrita dentro del plan estratégico integral “Mi País Seguro”, promovido por el gobierno que encabeza el presidente Luis Abinader, contempla la instalación de unas 26,000 luminarias por parte de la Distribuidora.

A la fecha, Edeeste ha intervenido con esta iniciativa a sectores y vías públicas en el Distrito Nacional, así como Santo Domingo Norte y Este. Igualmente, nuevas lámparas LED de 90 watts (W) han sido colocadas en municipios del este del país como: Boca Chica, San Pedro de Macorís, Consuelo, Ramón Santana, Quisqueya, El Puerto, La Romana, Guaymate, entre otros.

Con el programa han sido alumbrados, hasta el momento, puntos específicos de sectores como Guachupita y Villa Mella. En este último se resaltan las localidades Buena Vista I, Los Palmares, Ponce, Residencial Claribel y la carretera Mella, entre las avenidas San Vicente de Paul y Charles de Gaulle.

Otras vías, en la capital, donde Edeeste ha colocado nuevas luminarias y/o normalizado las existentes son: la calle Central del Espaillat, así como las avenidas Francisco del Rosario Sánchez (completa), Juan Pablo Duarte, entre la Máximo Gómez y París, y la Ramón Matías Mella.

En una nota de prensa, la Distribuidora resaltó que “Iluminado el País” es financiado con recursos del Ministerio de Interior y Policía y fondos de la cooperación internacional. Las acciones propuestas en el mismo son: reemplazar lámparas viejas y dañadas por otras modernas y eficientes, instalar nuevas luminarias en zonas oscuras o mal iluminadas y establecer un plan de mantenimiento de dichas unidades para garantizar su funcionamiento adecuado.

También dijo que este plan se implementa en fases, comenzando por los barrios más vulnerables de su zona de concesión, a fin de mejorar la visibilidad en dichas áreas para disuadir la delincuencia y crear un ambiente más seguro y agradable para sus residentes.